Beneficios del ejercicio en la diabetes tipo 2


Aunque el ejercicio regular es requerido en ambos tipos de diabetes en este caso se detallan los beneficios para los pacientes con diabetes tipo 2 puesto que la diabetes tipo 1 requerirá de un control mayor para evitar una hipoglucemia, el ejercicio físico regular (mínimo cada dos días) y de ser posible diario ayuda a prevenir y mejorar la diabetes.
Para que sea efectivo es necesario que esta práctica se extienda a largo plazo, no puede pretenderse que en una semana o dos el paciente este del todo bien aunque ciertamente los beneficios inician desde el primer día de entrenamiento, sus beneficios empiezan por el hecho de la disminución de la azúcar en sangre y disminución de ácidos grasos en el organismo, ambas significan una disminución importante del peso corporal, donde por cierto la mayoría de los diabéticos padecen de sobre peso u obesidad.

El ejercicio físico de forma directa disminuye la resistencia a la insulina aumentando la sensibilidad celular y prolongando su efecto hasta por 48 horas para posteriormente regresar a los niveles previos, por esto es que se recomienda la prioridad en el entrenamiento.

De forma indirecta el ejercicio ayuda a los pacientes diabéticos a disminuir el riesgo cardiovascular que significa una diabetes mal controlada, esta disminución del riesgo se debe al control constante de grasas saturadas y disminución de la grasa abdominal, fortaleciendo el musculo cardiaco y controlando la tensión sanguínea.

¿Un diabético puede hacer ejercicio con pesas?



Si puede realizarlos pero si el peso es mucho este ejercicio no ayudara significativamente a bajar de peso y por poder realizarse pocas repeticiones en comparación a otros entrenamientos es recomendable que no ocupen la totalidad del plan de ejercicios.

Los ejercicios más recomendados son los que se conocen como aeróbicos entre los cuales se incluye la natación, correr, caminar, bicicleta entre otros, durante el inicio se emplearan rutinas cortas de ejercicio los cuales irán aumentando con el paso de los días para evitar el cansancio extremo que produce el desánimo de continuar ejercitándose.

Puesto que los pacientes diabéticos no son insulinodependientes de seguir una dieta adecuada, disminuir su peso y mantener un plan de ejercicio físico, su médico puede recomendarle que disminuya la dosis de insulina o incluso que la suspenda, dependiendo del progreso de la diabetes reflejado en los resultados de los exámenes glucémicos.

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